Bruselas "vigila" las política de España en energías renovables

La Comisión Europea «vigila» el desarrollo de la política energética para las tecnologías renovables en España, con el objetivo de evaluar si es «necesario o apropiado» intervenir a nivel europeo. Así lo asegura el comisario europeo de Energía en una carta enviada a la Asociación Nacional de Productores e Inversores de Energías Renovables (Anpier) y distribuida este jueves por la asociación.

El responsable comunitario de Energía, Günter Oettinger, señala en la misiva que «los Estados miembros debería evitar medidas retroactivas» en el mercado de renovables.

Añade que ha hecho llegar esta recomendación al ministro español de Industria, José Manuel Soria, y que el sector energético debería ser tecnológicamente «neutral» para no tratar de forma desfavorable a los proyectos de renovables.

A pesar de ello, el comisario subraya que la situación fiscal en España es «crítica» y precisa de «pasos urgentes» para su reducción, un capítulo en el que se incluye la solución del denominado déficit de tarifa del sector eléctrico que acumula ya 24.000 millones de euros de agujero.

El presidente de Anpier, Miguel Ángel Martínez-Aroca, ha asegurado en un comunicado que «el texto de la futura reforma del sector eléctrico es transcendental» porque en él «se decide si nuestro país mira al futuro y se alinea con las políticas europeas, basadas en las renovables».

Planes para gravar más las tecnologías renovables
El Gobierno español prepara en estos momentos una reforma del sector energético que, según adelantó el mes pasado el ministro de Industria, José Manuel Soria, establecerá un impuesto para todas las fuentes de generación de energía, tanto renovables como convencionales. Soria señaló que el impuesto será «progresivo» para que las tecnologías que reciben más «subsidios» contribuyan más.

Aunque Soria no citó expresamente las tecnologías fotovoltaicas y termosolar, que son las que más primas reciben por megavatio hora producido y que a priori serían las más afectadas por esta medida, sí reconoció que las primas comprometidas con las renovables hasta 2020 ascienden a 70.000 millones de euros y que, si Industria decidiese recortarlas, generaría inseguridad jurídica. Por eso, el Ejecutivo parece haber optado por reducirlas vía impuestos y no directamente.

En enero de este año, Industria suspendió temporalmente los procedimientos de preasignación de retribución renovable y suprimió -tambien con carácter temporal- las primas para nuevas instalaciones de producción de energía eléctrica a partir de fuentes de energía renovable, residuos y cogeneración.

Además de esa moratoria, el sector eólico está sufriendo los efectos de la falta de definición de un marco regulatorio a partir de 2013. La actual normativa concluye este año y los promotores aún no tienen indicaciones acerca de lo que ocurrirá en el futuro.