Al cierre

El Ibex 35 ha retrocedido un 0,42% en la primera sesión de la semana, que lo ha dejado en los 11.102 puntos. Una encuesta aparecida este fin de semana en el Reino Unido, a pocos días de que se celebre el referéndum de independencia en Escocia, da por primera vez ventaja a los independentistas por encima de los unionistas, lo que ha sacudido a los mercados en la sesión de hoy. Los inversores han optado por la recogida de beneficios en el arranque de la segunda semana de septiembre y tras unas considerables revalorizaciones los pasados jueves y viernes, al albur de las medidas adoptadas por el Banco Central Europeo en su reunión ordinaria de septiembre.

Los expertos apuntaban hoy a una jornada de transición, sin demasiadas contingencias a las que acogerse para tomar una dirección clara. Todo apuntaba a que se intentaría digerir tanto los estímulos monetarios de Draghi en Europa, como el mal dato de empleo en Estados Unidos publicado el viernes. Todo ello, con el ruido de sables procedente de Ucrania cada vez más tenue y apagado, aunque los expertos no se olvidan por completo de un conflicto que lleva desde el viernes con el alto el fuego decretado.

Sin embargo, los mercados financieros no han tenido la calma esperada a priori para hoy. En esta ocasión, los inversores han hecho saltar las alarmas con la encuesta de Escocia, que da ventaja a los independentistas por primera vez. Esta nueva e inesperada vicisitud política en las Islas ha hecho que la libra cayera con respecto al dólar un 0,42%. La renta variable también ha sido sensible a la situación y el principal índice del Reino Unido, el FTSE 100, ha bajado un 0,3% en una jornada con fuerte volatilidad.

El resto de bolsas europeas han terminado de forma dispar. Mientras que el Dax alemán ha avanzado un 0,11%, el FTSE Mib italiano se ha dejado un 0,55% y el Cac 40 francés ha bajado un 0,26%.

Al otro lado del charco, los principales índices también se han mostrado dubitativos y en tono mixto. Poco después de que cerraran las bolsas europeas, el Dow Jones perdía un 0,11% y el S&P 500 se debaja un 0,28%. Por el contrario, el Nasdaq avanzaba un 0,05%. Los expertos apuntan a que el mercado está interpretando con dificultad el mal dato de creación de puestos de trabajo en agosto. Los operadores no acaban de ver si esto supondrá que la subida de tipos por parte de la Reserva Federal todavía tardará en llegar o, por el contrario, si los buenos PMI e ISM publicados para Estados Unidos últimamente traerán buenas referencias de empleo en los próximos meses. Este segundo escenario, podría hacer que la FED se plantearía más tarde que pronto la temida subida de los tipos de interés.

En este contexto, dentro del Ibex 35, el sector energético ha sido el que más ha tirado a la baja del selectivo. Así, Enagás ha caído un 1,30%, Gas Natural se ha dejado un 1,07% e Iberdrola ha retrocedido un 1,13%. La eléctrica vasca ha sufrido los malos augurios para sus inversiones en Escocia si se imponen los independentistas.

Por otro lado, ArcelorMittal, Banco Popular, Indra, Sacyr y FCC han conseguido avanzar por encima del 1%.

Entre los pesos pesados, además de tropezón sufrido por Iberdrola, Inditex ha retrocedido un 0,93%, Repsol ha caído un 0,70%, Telefónica ha bajado un 0,16%, BBVA ha perdido un 0,30% y el Santander ha cedido un 0,35%.

En el mercado de deuda, tanto el interés del bono soberano como la prima de riesgo se alzaban levemente antes de que cerraran los mercados de renta variable en Europa. De esta manera, la rentabilidad del bono español a diez años se situaba en el 2,08% y la prima de riesgo subía hasta los 114 puntos básicos, con lo que siguen muy estables gracias al «efecto BCE».

En el mercado de divisas, también las palabras de Draghi continúan teniendo su efecto y el euro caía a la hora del cierre de las bolsas en el Viejo Continente. La moneda comunitaria se cambiaba por 1,294 billetes verdes.