Niño Becerra: la España que hemos conocido ya ha dejado de existir

El Lunes 9 Uds. leyeron aquí un texto mío, ‘Hoy pintan mal las cosas  pero pintarán peor mañana‘ , que fue causa de que recibiese un mail muy interesante que  compartiré con Uds. dentro de unos días. La idea básica que mi lector me transmitía era la de que el mensaje que daba era muy desesperanzador.

Bien. Ayer el discurso en el Parlamento del Sr. Presidente de un Gobierno que fue elegido por aclamación, no debe olvidarse eso nunca jamás. Resumen del resumen de la intervención: una frase del mismo Sr. Rajoy: «Hoy no es posible crecer y crear empleo», lo que sucede es que, pienso, mañana tampoco.

Haciendo cuatro números a partir de las pocas cifras que dio el Sr. Rajoy se llega a la siguiente conclusión: si, para cumplir con los compromisos contraídos con Europa, en  los dos próximos años España ha de conseguir 65 mM€ (pienso que acabarán siendo más) subiendo impuestos y recortando gastos en una atmósfera de nulo crecimiento positivo, la conclusión es la de que entre el 2012 y el 2014 el PIB de España puede llegar a tener un crecimiento de entre el -6,0% y el -6,5%, pudiendo colocarse la tasa se desempleo-subempleo en el 30%.

Pero a lo anterior hay que añadir una cifra que también dio el Dr. Presidente del Gobierno: la deuda total exterior de España está situada en el 165% del PIB, y otra que no dio: la deuda total privada supera el 300% del PIB. Es decir, además de tener que reducir 65 mM de déficit, España y su ciudadanía, y sus empresas, y sus bancos, y sus ayuntamientos y sus regiones van a tener que seguir pagando lo que deben.

¿A que aboca algo así?, pues a una situación muy parecida a la que Latinoamérica vivió en los años 1980s: empobrecimiento, aumento de la economía informal (para utilizar un concepto muy latinoamericano), subempleo, precariedad; y sin alternativas.

La España que hemos conocido ya ha dejado de existir porque es insostenible ya que no puede financiarse. Es decir, aquella dinámica que se vivió de ir TODOS siempre a más ya ha concluido porque lo que la posibilitó -el aumento continuado y exponencial del endeudamiento- ha finalizado, y como las fuentes generadoras de PIB se han secado -construcción, automóvil, …-, ahora lo que queda es el ir-a-menos debido a que hay que recortar y subir impuestos para reducir déficit y rebañar el perolo a fin de pagar lo que se debe. Si no hay novedades tipo quitas o algo por el estilo (que no descarto), eso es lo que hay.

¿La subida del IVA?, lógica: que paguen más quienes no pueden escaparse y en lo que no haya escape posible. Las otras ‘medidas’: algo parecido.

Mexicanización de la economía, portugalización de la operativa (también en Portugal se empezó subiendo el IVA al 21%), y grieguización en cuanto a los resultados. ¡Vaya panorama!, sí.

Y todo eso con la economía monitorizada y teleguiada y España intervenida. Y asumiendo que no hay alternativa. Una intervención que lo que dice a España es que ya no puede seguir haciendo lo que hacía porque ahora esas cosas son perjudiciales para el euro, y España es uno de sus miembros. Y si no hacer lo que España hizo supone que va a crecer mucho menos de lo que creció, o nada en absoluto, pues mala suerte.

Ahora, si no lo leyeron, les sugiero lean el texto ‘Hoy pintan mal las cosas  pero pintarán peor mañana’

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.