Niño Becerra: ¿Dónde está España, y adónde va?
A veces vale la pena detenerse un momento, mirar alrededor y preguntase: ¿Qué ha pasado?, ¿Qué está sucediendo?, ¿Hacia dónde nos dirigimos?. A veces vale la pena a fin de llegar a una respuesta: ¿se va a seguir siendo lo que se ha sido?: ¿va a seguir siendo España lo que fue?.
¿Cómo se ha llegado a donde se está?
Tras España 92: Barcelona 92, Madrid 92, Sevilla 92, nada. ¿Con qué contaba España para seguir con aquel sueño además de con Sol, espacio y factor trabajo?; con muy poco.
Sumen la Ley del Suelo de 1998 y sus colaterales; los efectos de la creación del euro como unidad de cuenta en 1999 y como moneda de bolsillo en el 2002; el inicio de esta-cosa-denominada ‘Preferentes’, también en 1999; la igualación de riesgos-país; el descenso de los tipos de interés; la concesión de créditos bancarios, cajiles, chiringuiteles, a cualquiera contra cualquier cosa. ¿Qué obtienen?. ¡Exacto!: ‘España va bien’.
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El Gobierno del reino espera que a lo largo de esta semana suceda “algo” (El País 24.07.2012, Pág. 18) que rompa esta dinámica de coste de la deuda al alza, deterioro de la imagen económica del país, fuga de capitales, … en que está metida la economía española. “Algo”, ¿qué?.
Pienso que cuando un Gobierno dice una cosa como esa, una de dos, o bien ya sabe qué es ese ‘algo’ y, por lo que sea, no lo dice (posiblemente porque le han dicho que no lo diga quienes posibilitan ese ‘algo’), o bien es un burdo farol de rincón oscuro de saloon de mala muerte de Tucson en la segunda mitad del 1850. Quiero pensar que es lo primero. Y, ¿qué puede ser?, pues que el BCE compre deuda a fin de que la situación se calme un poco hasta que en Septiembre / Octubre, con todo ya dibujado, se empiecen a restructurar cosas: aquí, allí y en todas partes.
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Ya estamos otra vez: se cometieron errores, se cometieron excesos: ayer en el Parlamento del reino. ¡Fuimos malos. Fuimos malos!
“No lo volveré a hacer más.
…
Lo siento mucho,
la vida es así. No la
he inventado yooo.
…”.
(Sandro Giacobbe, “El jardín prohibido”)
Ninguna mención a que ‘España fue bien’ debido a esos excesos; a que la única forma de que ‘España fuese bien’ era cometiendo tales excesos. Ninguna. ¡Y nadie la pide!.
Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull. La carta de La Bolsa