Los robo advisors han llegado para quedarse. Un robo advisor es un gestor automatizado de inversión pasiva que te permite multiplicar tu dinero. Su nombre viene a significar en español: asesor robotizado. Las inversiones se realizan según algoritmos y modelos inteligentes y los productos en los que suelen invertir son ETF o fondos indexados. Inversión pasiva quiere decir que tú no tienes que hacer absolutamente nada, solo abrir tu cuenta, y el propio gestor será quien se encargue de realizar y rentabilizar tus inversiones. Son, por tanto, una magnífica opción para ganar dinero y ahorrar tiempo.
A pesar de la sencillez de estas plataformas de inversión pasiva, en las que cualquier persona puede invertir en productos financieros, incluso sin tener el más mínimo conocimiento bursátil, sí que es altamente recomendable conocer el sector. De esta forma podrás aprovechar mejor la inversión y podrás ver cómo funciona el mercado financiero, o podrás tomar algunas decisiones según veas cómo estén marchando tus inversiones. Al fin y al cabo, estas plataformas también te pueden servir para seguir aprendiendo y mejorando tus dotes de inversor.
Por qué invertir en un robo advisor
Los robo advisors te permiten comenzar en el mundo de las finanzas y la inversión. Estos asesores facilitan que cualquier persona pueda entrar en este sector y mejorar su capital sin necesidad de conocer cómo funciona el mercado o teniendo unos conocimientos muy limitados. Son también una excelente opción para aquellas personas que, teniendo los conocimientos suficientes para poder invertir por su cuenta, no disponen del tiempo suficiente que requiere hacer las inversiones adecuadas.
Otro punto a favor de los robo advisors es que se ha demostrado que la gestión pasiva da mejores resultados a largo plazo que la gestión activa. Y en el terreno de la inversión, la rentabilidad lo es todo.
En líneas generales, estos gestores ofrecen una cartera de inversión diversificada y totalmente automatizada a muy bajo coste.
Ventajas de los robo advisors
Veamos cuáles son los beneficios que aportan los gestores automatizados de inversión:
- No necesitas investigar el mercado ni crear una cartera de inversión.
- Está automatizado. Una vez que se ha determinado tu perfil inversor y has hecho el primer depósito, la plataforma se encarga de administrar tu capital en busca de la mayor rentabilidad posible.
- Comisiones más bajas que los gestores de inversión activos. Aunque está claro que, si las inversiones las hicieses por tu cuenta, esas comisiones serían aún más bajas, pero eso exige tener conocimientos en el campo de la inversión y dedicar mucho tiempo a estudiar los mercados y los diferentes productos que están disponibles.
- Atención personalizada.
- Plataformas sencillas e intuitivas. Son agradables y están especialmente pensadas para aquellas personas que no conocen el mundo de la inversión, por lo que toda la información está muy bien explicada y es accesible.
- Las plataformas cuentan con herramientas muy útiles como puede ser una calculadora de rentabilidades, una herramienta que, por otra parte, no hay que tomar como un dogma, ya que el mercado financiero se caracteriza por ser volátil, pero sí que sirve para que puedas tener una idea aproximada de los resultados.
- Diferentes estrategias de inversión dependiendo de si prefieres invertir en productos más rentables y de un mayor riesgo u opciones que te harán ganar menos dinero. A través de unas preguntas, lo que se conoce como test de riesgo, el gestor sabrá cómo debe realizar tus inversiones.
- Permiten la inversión en fondos que no suelen ser accesibles para los inversores particulares.
¿Son seguros los robo advisors?
Una de las cuestiones que más preocupan a los usuarios es, lógicamente, la de la seguridad. Al ser un tipo de plataforma novedosa, es muy habitual ver sospechar a los interesados, unas sospechas que también están a la orden del día en todo lo que tiene que ver con los pagos y con las plataformas de compra por internet.
Para asegurarte de que tu robo advisor es totalmente seguro debes prestar atención a varios aspectos:
- Comprueba cuál es la entidad depositaria del dinero, ya que tu dinero no está en el gestor, sino que está bajo la custodia de un banco. El asesor robotizado solo se encarga de realizar las inversiones.
- Coteja qué garantías ofrece el robo advisor en cuestión. Tomemos, por ejemplo, el caso de Finizens, un gestor 100% seguro; la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones (DGSFP) respaldan su autenticidad como agencia de valores.
- Otro factor que debes comprobar antes de esperar a operar con un gestor automatizado es ver qué entidades garantizan tu dinero, entidades como, por ejemplo, el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) y el Fondo de Garantía de Inversiones (FOGAIN).
- Por último, siempre puedes indagar qué es lo que dicen los usuarios de cada plataforma. Las opiniones de Finizens corroboran todo lo apuntado en los demás puntos. Puedes hacer lo mismo con cualquier otro asesor robotizado para terminar de contrastar su grado de seguridad.
En conclusión, los robo advisors son la opción que estaban esperando aquellas personas interesadas en invertir una parte de su capital, pero no sabían por dónde empezar porque, o bien no tenían los conocimientos necesarios para lanzarse, o bien no contaban con el tiempo suficiente para hacerlo.