¿Aciertan los analistas?
En pocas ocasiones los analistas han reflejado un optimismo tan unánime como el que arrojan sus previsiones bursátiles para 2014.
La euforia persiste después de un año, 2013, que se ha ajustado en buena parte a las perspectivas que anticipaban las firmas de inversión hace ahora 12 meses.
Las previsiones anunciadas por las grandes firmas de inversión entre noviembre y diciembre de 2012 auguraban un 2013 claramente alcista en las bolsas. Sus estimaciones se basaban en gran medida en un contexto de política monetaria favorable. Pronosticaban que la Reserva Federal de Estados Unidos mantendría sin cambio sus ‘tipos cero’ y sus estímulos monetarios.
Sólo la última reunión de la Fed, la de diciembre, ha introducido modificaciones, al recortar ligeramente la cuantía destinada a su programa de compra de deuda. En el caso del Banco Central Europeo, auguraban nuevos recortes de los tipos de interés, hasta el 0,5% o el 0,25%. Y en la recta final del año, la reunión de noviembre acabó rebajando los tipos al 0,25%.
Los analistas ya vaticinaban para 2013 una ‘Gran Rotación’ en los mercados Con este panorama para 2013, la renta fija perdía protagonismo en sus carteras, y la renta variable se convertía en su gran apuesta. Los signos de una ‘Gran Rotación’ en los mercados financieros ‘infraponderaron’ el apetito por la deuda pública y elevaron a máximos desde agosto del año 2006 la exposición de los hedge funds a la bolsa.
Un año después, las bolsas se han confirmado como la gran estrella de 2013. La renta variable mundial ha superado este año el 20% de revalorización media, según el índice MSCI World Index. La contundencia de estos avances ha superado las expectativas de los analistas. La Bolsa de Tokio, con su rally, ha supuesto uno de los mayores ‘errores’ en sus previsiones.
En sus estimaciones para 2013 comenzaron a apostar por primera vez en los últimos ejercicios por Europa frente a Estados Unidos, y dejaron relegada en su lista de preferencias a la Bolsa de Tokio. Al final, el Nikkei, gracias a los efectos del ‘Abenomics’, ha brillado con una revalorización del 56%, su mejor año desde 1972.
Las subidas se han generalizado tanto en Europa como en EEUU, pero Wall Street ha logrado mejorar a las plazas del Viejo Continente. Después de pulverizar todos sus máximos históricos, el S&P 500 ha despuntado con subidas del 30%. Al otro lado del Atlántico, el índice paneuropeo Eurostoxx50 se ha quedado por debajo del 20% de subida. Los analistas prevén subidas para 2014, pero… ¿han acertado en 2013? En el caso concreto de la bolsa española, las subidas han superado las previsiones de los analistas. El consenso situaba al Ibex en el entorno de los 9.000 puntos al cierre de 2013. Sólo los más optimistas anticiparon que el índice selectivo llegaría a acercarse a los 10.000 puntos, un umbral que llegó a superar el pasado mes de octubre.
Mayor grado de acierto que en sus recomendaciones geográficas han tenido los analistas en sus consejos sectoriales. Las utilities destacaban entre sus sectores menos preferidos, y el de Salud y Farmacétuicas entre sus favoritos. Doce meses después, las utilities se han quedado rezagadas en la subidas, mientras que las empresas ligadas con el ámbito sanitario han brillado con subidas próximas al 30% de media, según el índice Stoxx Global 1800 Health Care. Además, 2013 comenzó con una clara mejora en las perspectivas sobre el sector financiero, y estos progresos se han plasmado en contundentes avances.
El espectacular comportamiento de la renta variable se ha sustentado en el drástico repliegue de la aversión al riesgo. A finales de 2013 las firmas de inversión señalaban como principales amenazas para los mercados el ‘abismo fiscal’ de EEUU y la crisis de deuda europea. Con suspense incluido, pero la Administración Obama logró aplazar la sombra de la suspensión de pagos, antes del acuerdo definitivo alcanzado, por sorpresa, este mes de diciembre. En el caso de Europa, la mejora en las economías periféricas ha desinflado las alertas derivadas de la crisis de deuda.
La deuda periférica ha aprovechado este contexto para mejorar el comportamiento de la renta fija global. Doce meses atrás, los signos de una ‘Gran Rotación’ ya llevaron a los gestores de fondos a mostrar su menor preferencia por los bonos desde abril de 2012. La renta fija se ha quedado muy rezagada respecto a la renta variable, y la deuda pública de grandes potencias como EEUU, Reino Unido y Alemania han deparado tasas de retorno negativas.
En el mercado de divisas, los analistas tenían claro desde hace más de 12 meses que 2013 sería el año de la debilidad del yen. Sus pronósticos se han cumplido, y el dólar cierra el ejercicio en máximos de cinco años respecto a la divisa japonesa. El euro, por su parte, se ha mantenido dentro del rango previsto por las firmas de inversión en su cruce con el dólar, si bien no ha cumplido con las expectativas mayoritarias de nuevas caídas.
Las materias primas no figuraban precisamente entre las recomendaciones de las firmas de inversión para 2013, y los inversores que siguieran sus consejos han podido eludir las caídas generalizadas que han sufrido las commodities. El índice S&P GSCI Spot Index, que aglutina 24 commodities, ha registrado su primera caída desde 2008. El oro se desinfla casi un 30% en su peor año desde 1981, la plata un 36% y el maíz casi un 40% en sus mayores caídas anuales en cerca de medio siglo. Un comportamiento más favorable ha logrado el precio del petróleo.Expansión