Al cierre

El Ibex 35 ha dado un segundo pasito muy pequeño hacia adelante en lo que va de semana. Después de que ayer avanzara con mucha timidez, la subida de hoy se ha limitado al 0,08%, lo que le ha permitido llegar a los 10.755 puntos y sigue mirando a los 10.800.

El factor fundamental que mantiene prácticamente inmóviles a los mercados de renta variable es la reunión ordinaria de septiembre del Banco Central Europeo, que se celebrará el próximo jueves. La debilidad de los datos macroeconómicos en Europa que han ido apareciendo en los últimos días ha metido toda la presión al órgano de política monetaria europea, para que tome medidas extraordinarias que ayuden a reactivar la débil economía comunitaria. El último en pedir nuevas medidas a Mario Draghi ha sido el presidente de la república francesa, François Hollande.

Al margen de lo que pueda hacer el BCE, que tiene paralizadas a las bolsas, los inversores siguen con un ojo puesto en la situación geopolítica y en lo que suceda en Ucrania, que ha provocado fuertes descensos durante el verano. En la sesión de hoy, también las tensiones se han dejado sentir en los mercados. Han aparecido rumores de que la Unión Europea prepara nuevas sanciones para Rusia, por lo que los selectivos han perdido algo de fuelle a media sesión.

Con este panorama, las bolsas europeas han cerrado prácticamente inmóviles y con tono mixto. El Dax alemán ha avanzado un 0,30%, el Cac 40 francés ha caído un 0,03%, el FTSE 100 inglés ha escalado un 0,06% y el FTSE Mib italiano ha liderado las bolsa y se ha anotado un 0,49%.

Al otro lado del charco, Wall Street ha arrancado hoy su primera sesión de la semana también con cautela. Allí están a la espera de un dato macro importante que aparecerá el viernes: el paro en el mes de agosto en Estado Unidos. Mientras tanto, antes de que cerrara la bolsa en Europa, los operadores de la Bolsa de Nueva york conocían el ISM de manufacturas en agosto, que ha subido y ha estado mejor de lo esperado. Sin embargo, el Dow Jones y el S&P 500 caían un 0,07%. Por el contrario, el Nasdaq escalaba un 0,21%.

Dentro del Ibex, los valores que más han contribuido a que el selectivo haya terminado en verde han sido los bancos medianos y Mediaset. Así, además del 1,3% que se ha anotado la compañía de medios de comunicación, el Banco Popular, Bankia, Bankinter y CaixaBank han escalado por encima del 1%. Por el contrario, Jazztel, Acciona y BME han bajado más de un 1%.

Los pesos pesados del Ibex han cerrado con tono mixto. BBVA (+0,34%) e Inditex (+0,56%) han conseguido cerrar con revalorizaciones. El resto ha cerrado con pérdidas: el Santander se ha dejado un 0,25%, Repsol ha caído un 0,37%, Telefónica ha bajado un 0,33% e Iberdrola ha retrocedido un 0,29%.

En el mercado de deuda, el interés exigido por el bono español a diez años subía hasta el 2,27% a la hora de cierre de las bolsas en Europa. Por otro lado, la prima de riesgo bajaba a esa misma hora hasta los 134 puntos básicos.

En el mercado de divisas, el euro se devaluaba ligeramente con respecto al dólar a la hora de cierre de los mercados de renta variable en el Viejo Continente. Así, la moneda comunitaria se cambiaba por 1,312 billetes verdes.