El oro, tras alcanzar la media de 200 sesiones, que le ha servido históricamente de apoyo en sus consolidaciones, ha reaccionado al alza, por lo que es muy probable, que haya puesto fin a la consolidación que inicio el seis de septiembre, y se prepare para un nuevo tramo alcista, que no estará exento de volatilidad, dadas las condiciones de los mercados.

Por lo que se refiere al análisis técnico en el largo plazo, desde 1999 y niveles de 250 dólares, el oro mantiene una tendencia alcista que se ve acelerada en 2005, pasando desde entonces a moverse en una nueva tendencia canalizada, guiada por una directriz de mayor pendiente y que le lleva en marzo de 2008, hasta máximos en 1.033 dólares.

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El encuentro con los 1.033, provoca una figura de vuelta en forma de throwback a la directriz en los 700 dólares, desde donde se impulsa. El movimiento va dibujando una potente figura de Hombros-Cabeza Hombros invertida con fuertes implicaciones alcistas para el largo plazo.

En el medio plazo, tras el throwback típico de este tipo de formaciones, supera la clavicular a su paso por 1.025 y acelera tendencia para pasar a moverse a lo largo de un canal alcista acelerado cuya base se proyecta en los 1.500 dólares.

En el corto plazo, el impulso supera máximos históricos y el techo del canal alcista, hasta alcanzar nuevos máximos en los 1.920, obstáculos que dan lugar a una formación de doble techo con implicaciones bajistas, y que se confirman en un nuevo impulso bajista, que encuentra apoyo en la media de 200 sesiones.

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El índice de movimiento direccional ADX, es alcista, sobre ADXR y en niveles de 38,97, mientras que el indicador de convergencia divergencia MACD, es negativo y bajista, bajo su línea de señal, aunque con síntomas de cansancio y el oscilador es negativo y gira al alza. Indicadores aun débiles pero que avisan de cierta mejoría en la tendencia del oro.

El oscilador estocástico, gira al alza desde fuerte sobreventa, mientras que el RSI, rebota al alza desde la línea inferior de sobreventa, mostrando mayor presión de las fuerzas compradoras.

En conclusión, la tendencia del oro sigue alcista, aunque en un proceso de consolidación que puede haber concluido, por lo que mientras se mantenga sobre los 1.532 dólares, es de esperar continuidad en la recuperación, con primeros objetivos en 1.720 – 1.820 dólares.

La perdida de los 1.532 dólares, con un filtro a 1.475 anularía el escenario de recuperación y daría continuidad al impulso bajista, con primeros objetivos en los 1.380– 1.310 dólares.

Saludos y felices inversiones.

LONE___